Ovejas Heridas

logo1_400

Ovejas Heridas

Te cuesta pedir ayuda
porque no te fías de nadie
y te han hecho creer que eres culpable,
que no mereces nada.

Santa María de las Ovejas Heridas
Santa María,
Madre de las ovejas heridas,

tú que fuiste protegida por Dios de todo pecado
y fuiste conservada Virgen por Él,
intercede por nosotros, pequeñas ovejas,
heridas en nuestros cuerpos y nuestras almas
por los abusos de pastores asalariados,
que pretendían ante nosotros
que la fidelidad a Dios pasaba por ellos.

Tómanos en tus brazos,
protégenos, acarícianos
para que, puestos en tus manos
no perdamos la fe,
nuestras heridas vayan sanando
y podamos nuevamente
alabar a nuestro Buen Pastor
con todo nuestro cuerpo y nuestro espíritu,
como tú hiciste en el Magníficat.

Ruega por nosotros,
santa Madre de Dios,
para que seamos misericordiosos como tu Hijo,
Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.